Notas sociales #87
21/03/2024 al 26/03/2024
Los problemas honestos dejaron de existir. Ahora son lagunas de disconformidad avivadas por el megáfono digital de las redes.
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El hastío es la rebelión contra la rutina.
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Yo no quiero sanar porque sanar implica una promesa; implica un lugar en el que pueda dormir tranquilo, que siquiera puede ser mío.
Sanar sería atarme a un nuevo ciclo de sufrimiento.
Sanar es la infantilización chamuscada de la autocompasión.
El mundo, así como lo ven, es un larvario de autocompasión para mentes dispersas.
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Existe la farándula literaria; lo que no existe es el dinero para crear una metodología que nos dé trabajo a todos.
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Yo no quiero fingir que he leído a la mitad de mis contemporáneos, ni tampoco pretender que ellos me han leído a mí.
Hago paráfrasis interviniendo un diálogo de Bilbo: «No he leído a la mitad de ustedes ni a la mitad de lo que querría, y lo que yo querría es menos de la mitad de lo que la mitad de ustedes merece».
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Gente que habla de videojuegos sin haber tocado uno en su vida. (Check)
Gente que organiza un club de lectura sin haber leído el libro a discutir (Check)
Gente que escribe y no lee (Check)
Gente que recomienda y jura que la vida es mejor sin escuchar música (Check)
Gente que se cree punk y en su vida se han comido la luz de un semáforo (Check)
Gente que ama Caracas pero no vive la ciudad por ansiedad (Check)
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Colecciono momentos de los que no puedo escapar.
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Hay que morir con las notas puestas.
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Que quede constancia de que aquí había algo tan fuera de mí que tuve que borrarlo cuando volví a revisarlo.
