Notas sociales #128
04/12/2024 al 17/12/2024
Mayale: «Internet rápido y novia gótica. Mis respetos».
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El país está cancelado desde el 28 de julio.
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Me saca un poco de onda no ir a la universidad. Ya con un pie afuera siento exceso de horas muertas en casa. Nada me reta, más que la vida cotidiana, que es más bien reiterativa, cíclica. Nada me motiva a pensar más que mis propios proyectos, y estos no parecen ser tan interesantes como el hecho de andar por el pasillo de Letras, existiendo sobre algo que aún no logro describir fuera de que es un pedacito de mi lugar en el mundo.
Sigo sin saber quién seré cuando me gradúe.
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«He venido a explorar el naufragio. Las palabras son propósitos. Las palabras son mapas. He venido a ver los estragos causados y los tesoros que perduran».
— Adriene Rich
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Brillante esto que encontré por redes: «Pues no. Marx no fue ni vegano, ni feminista, ni descolonial, ni barriobajero. Fue lo que su tiempo le permitió ser: un borracho inteligentísimo».
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Soy el borracho tapao’ de mi tiempo.
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Esta es una idea de Kelly Martínez-Grandal. Verdaderamente no darse cuenta de las diferencias, incluso estilísticas, entre narradores como Tolkien y Asimov, y llamar ciencia ficción a todo ese conjunto de literaturas no miméticas, es revolcarse de flojera. O sea, vamos, y me disculpan, tampoco es tan difícil; hasta un diletante puede observar el abismo de distancia entre ambas fabulaciones.
Me da rabia que yo tenga que hacer una tesis de pregrado discurriendo a veces sobre lo obvio, pero ajá, aparentemente se nos olvida que la literatura es un campo de ideas racionales, y por ende, de obviedades dosificadas.
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La literatura son todos los asuntos pendientes que dejaré en vida.
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El único miedo es el tiempo.
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Suzu: «Otras veces pienso que el tiempo en que no te miro es tiempo perdido así que te miro mucho».
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«Un escritor no es universal por sus temas. Todo escritor es universal si acierta a iluminar aunque sea un sector pequeño de la vida, de la sensibilidad, del sentimiento del hombre. Para ser universal es menester, en primer término, la claridad. La claridad en el lenguaje, la lucidez en la exposición, la intensidad en el propósito».
— Guillermo Morón
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A veces pienso, y muy en serio, que hay gente que solo es feliz tratándome si ando miserable.
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Tanta cosa por hacer y yo pensando en la tesis, siendo la tesis lo que hay que hacer.
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La baja calidad de la polarcita ha obligado a varios de mi generación a darle la espalda. Ahora, con la nula pena de un alcohólico, toca abrazar una solera azul.
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Con la muerte de Elisa Lerner, Violeta Rojo y Krina Ber, debe venir una tarea, no, un deber, para los editores de acá: digitalizar sus obras para el acceso de todos; perpetuar y hacer valer el discurso más allá de las condolencias.
La mayoría de esos libros son escurridizos, y por ende, su llegada a nuevos lectores también. Incluso si estos llegan por recomendación, será caso perdido.
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José Pulido a Roberto Echeto:
« — La imaginación ¿no es la mejor esperanza que tenemos?
— La imaginación es el futuro desarmado (y sin instrucciones)».
